El ramen instantáneo es un plato popular en todo el mundo debido a su sabor delicioso y su preparación rápida y fácil. En este post, te enseñaremos cómo hacer ramen instantáneo en casa y personalizarlo a tu gusto.
Los ingredientes que vas a necesitar para hacer este ramen instantáneo son:
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- 1 paquete de ramen instantáneo (con sabor a tu elección)
- 2 tazas de agua
- 1 huevo
- 1 taza de vegetales picados (opcional)
- 1/2 taza de proteína (pollo, cerdo, tofu o camarones, opcional)
- Salsa de soja o sriracha al gusto (opcional)
Hacer ramen instantáneo en casa es fácil y rápido, y puedes personalizarlo a tu gusto para obtener un sabor delicioso. Con unos pocos ingredientes adicionales, puedes hacer un plato completo y satisfactorio en pocos minutos. ¡Disfruta de tu delicioso ramen casero!
Hierve las 2 tazas de agua en una olla mediana. Agrega los fideos del paquete de ramen y cocina durante 2-3 minutos, revolviendo ocasionalmente. Mientras se cocinan los fideos, hierve un huevo en otra olla pequeña durante 6-7 minutos para obtener un huevo duro o durante 4-5 minutos para obtener un huevo medio. Retira la cáscara y corta el huevo por la mitad.
Agrega las verduras y la proteína a la olla del ramen y cocina durante otros 2-3 minutos o hasta que estén tiernos. Retira la olla del fuego y agrega la salsa de soja o la sriracha al gusto, si lo deseas. Sirve el ramen en un tazón y agrega el huevo cocido por encima.
¡Y ya está! Ahora tienes un delicioso ramen instantáneo casero listo para disfrutar. Si deseas personalizar tu ramen, aquí hay algunas ideas:
Agrega un poco de jengibre fresco y ajo picado para darle más sabor.
Agrega un poco de salsa de pescado para obtener un sabor umami adicional.
Agrega cebolla verde picada, cilantro o perejil para un toque fresco y herbáceo.
Agrega un poco de lima fresca para darle un toque cítrico.
Agrega un poco de aceite de sésamo para obtener un sabor tostado.
También puedes experimentar con diferentes verduras y proteínas para darle a tu ramen un toque diferente cada vez que lo prepares. Prueba con brotes de soja, zanahorias ralladas, champiñones, calabacines, carne de res o salmón para cambiar un poco.