Los langostinos se caracterizan por tener un cuerpo alargado y aplanado, que va desde la cabeza hasta la cola, en la que se encuentra la cáscara. El cuerpo está dividido en tres partes, la cabeza, el tórax y el abdomen. Además, tienen un par de antenas y cinco pares de patas, que les permiten moverse y capturar su alimento.
Los langostinos se diferencian de los camarones por tener un cuerpo más alargado y un sabor más suave. Además, su carne es firme y tiene un color rosado-anaranjado, que se vuelve blanco al cocinarlos.
Los langostinos son una excelente fuente de proteína de alta calidad, baja en grasas y colesterol. Además, son ricos en ácidos grasos omega-3, que ayudan a mantener el corazón saludable y a reducir la inflamación en el cuerpo.
También son una fuente importante de vitaminas y minerales, como la vitamina B12, el hierro, el selenio y el zinc, que son necesarios para mantener una buena salud y prevenir enfermedades.